martes, 11 de noviembre de 2014

-No me olvides, te lo pido- susurro en la oscuridad, todo estaba tan oscuro como su alma.-Te prometo que tratare de ser mejor, lo que quieras por ti -lagrimas corrían por su rostro- Pero no me olvides...

Y sus gritos de dolor solo fueron escuchados por la oscuridad.
 Pero como todos en su vida; lo único que hizo fue abandonarla sin piedad.

En soledad nació.
En soledad vivió.
 Y...
En soledad murió.

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